Llevo mas que quince años viviendo en el extranjero, para ser mas específico en la ciudad de Miami FL Estados Unidos. La rutina del día a día hace que cambiemos muchas costumbres y modismos. Lo mas curioso de esto es que cada vez que me encuentro a un hondureño conocido su acento es muy diferente al nuestro, es decir en pocas palabras ha perdido la esencia de ser hondureño.
Muchos lo califican de ser «pencada» o de «vende patria». lo cierto es que vivir entre tantas culturas nos hace perder nuestro origen en numerosas cosas. Tal vez este tema ya haya sido muy sonado, pero existe una cosa que pocos saben y es que cuando uno es oriundo de «teguz» o «tepas» como dicen por allí los mismos compatriotas no le creen. La primera pregunta seguido a eso es «de que piso de tegucigalpa es ??» o «todos son de la capital y niegan su pueblo… a saber de que arrabal es y le da pena decir.. «. La verdad esto me parece absurdo y estúpido de la misma gente de Honduras. Si ser hondureño es un «orgullo» como dicen muchos, no nos daría pena decir de fondo somos, así sea de un «polvasal» o arrabal remoto del olancho.
Siempre que alguien reacciona así me toca preguntarle de donde es y aclararle que no tengo la culpa de ser de allá y aunque ustedes no lo crean aquí en Estados Unidos a nadie le gusta Tegucigalpa por que dicen que es un hoyo horrible y solo cuestas hay en todo lado.
En conclusión, ustedes no se imaginan lo difícil que es encontrar a alguien que verdaderamente sea de Tegucigalpa y si por casualidad me lo encuentro, fijo es de «el carrizal». Este siempre es y será un tema de conversación y nos intercambiamos preguntas para comprobar si verdaderamente son capitalinos. Bueno, espero que el que llegue a leer este artículo en el extranjero, le haga entender que sí habemos capitalinos fuera del país y a mucha honra. Me despido con esto, a todo los lectores les deseo lo mejor. Muchos saludos desde la ciudad de Miami. Nos vemos muy pronto…
Miguel Matamoros